Volvemos esta semana a charlar con Lorena Alonso, del estudio de arquitectura Proyecto Aiso. En esta ocasión, le hemos preguntado por una de vuestras dudas más recurrentes.
Si tenemos que empezar desde cero la decoración o vamos a hacer una reforma, ¿qué es mejor cortinas o estores? Ella nos plantea tres preguntas, que nos harán verlo todo mucho más claro. ¡Vamos a por ello!
1. ¿En qué espacio va a ser instalado el estor/cortina?
En general, las cortinas, por su caída y movimiento aportan más elegancia. Casi siempre optamos por ellas en espacios como salones y dormitorios principales.
Pero ojo, esto no es ni mucho menos una regla. Cortinadecor tiene una variedad amplísima de estores. Los enrollables son muy buena alternativa para cualquier hogar.
Por otra parte, si la ventana se encuentra sobre un mueble como un escritorio o la encimera de la cocina, los estores se convierten en la opción más práctica.
2. ¿En qué tipo de ventana lo voy a instalar?
Si buscas unificar tu vivienda con un solo modelo, cortinas o estores, en este caso la cortina es la mejor opción, ya que se adapta a todo tipo de ventana, sea corredera, balconera, practicable u oscilobatiente.
Sobre todo, si el espacio está relacionado con una zona exterior como una terraza o jardín, las cortinas son siempre un acierto, por qué el sistema de apertura es más rápido y fácil, permitiéndonos salir fuera sin necesidad de abrir completamente las cortinas.
3. ¿Qué efecto quiero conseguir en el interior?
En el caso de querer una intimidad o control absoluto total de la entrada de luz natural, las dobles cortinas se convierten en la mejor idea.
El truco: una tela más tupida para la cortina superior y una tela más vaporosa para la cortina inferior, pudiendo graduar así el grado de incidencia solar e intimidad. Existen una variedad amplísima de telas y tipo de confección, adaptándose así a ambientes más relajados y naturales (telas más vaporosas y confección fruncida) hasta estilos más clásicos (telas con más peso y tupidas y confección tipo tabla u onda perfecta).
Por otra parte, el estor en su modalidad de screen se han convertido en una de nuestras opciones favoritas. Por un lado, evitan el deslumbramiento en el interior, pero mantienen visualmente la relación con el exterior (existen diferentes grados de apertura de la tela).
Al mismo tiempo, protegen la casa del sobrecalentamiento de la estancia, reflejando la radiación solar gracias a las propiedades de su tejido, ayudando así a la eficiencia energética.
En el caso de buscar un espacio atractivo y teatral, los sistemas de cortinas venecianas nos permiten jugar con la luz natural variando la inclinación de las lamas.
Lo que más nos gusta de este sistema es que aunque las lamas estén completamente cerradas, la estancia no queda totalmente a oscuras, al contrario de las clásicas persianas, que prácticamente es o todo o nada.